El Decamerón de la Guerra: Ucrania-Rusia, 2035

Prólogo:

En el año 2035, el mundo vivió en un estado de constante tensión, con la guerra entre Ucrania y Rusia arrasando con lo que quedaba del orden mundial. Los gobiernos del planeta, a lo largo de los años, habían intentado todo lo posible para evitar el apocalipsis, pero los enfrentamientos solo crecían, y con ello, los sufrimientos y las tragedias. En medio de todo esto, una ministra del gobierno español, la conocida Ministra Navarro, había tomado una decisión radical para preservar a los más valiosos de la nación: ordenar a varios ciudadanos y figuras influyentes entrar en uno de los mejores búnkeres, ubicados en el corazón de la montaña, para protegerlos hasta que se resolviera la guerra.

Dicho búnker, llamado "Refugio del Alba", era un lugar donde se pensaba que los supervivientes podrían sobrevivir al conflicto nuclear, en caso de que las bombas cayesen. Así, durante las primeras semanas de confinamiento, el aburrimiento se apoderó de ellos. La ministra, sabedora de que la paz solo se alcanzaría cuando los actores más influyentes se enfrentaran al miedo y la desesperación, ideó una forma de mantener la moral alta: cada noche, cada uno de los miembros del búnker debía contar una historia. Y estas historias, querían que fueran lo más extraordinarias posibles, como los relatos de antaño, para hacer olvidar las penurias del día.

Una semana pasó, y al llegar el séptimo día, cada uno de los habitantes del búnker había contado su relato. A continuación, los narradores:

 El relato de Antonio Solano

"Mi historia no tiene la grandeza que muchos pensarían. Yo fui soldado, combatí en varias misiones a lo largo de Europa. La guerra nunca me asustó; la violencia era algo cotidiano para mí. Pero lo que vivimos en 2035 fue diferente. Nunca imaginé que, después de tantos años, el mundo caería tan bajo. Cuando nos metieron en este búnker, yo ya sabía que el verdadero enemigo no era otro ejército, ni siquiera los rusos o los ucranianos. El enemigo era el miedo. El miedo a lo desconocido, a no saber si volveríamos a ver la luz del sol, si la humanidad sobreviviría. Eso fue lo que nos rompió. Aquel primer día en el búnker, con la Ministra Navarro delante, supimos que el mundo tal como lo conocíamos ya no existía."

El relato de Iván Korolev 

Vengo de un país devastado, de un pueblo que, por años, ha vivido bajo la sombra de un régimen autoritario. Cuando la guerra estalló, sabía que lo que estaba sucediendo en Ucrania no era solo un conflicto político; era la manifestación de todo el odio acumulado durante generaciones. Sin embargo, estar aquí, con todos ustedes, en este búnker, me ha hecho reflexionar. Aquí, no hay rusos ni ucranianos, no hay alianzas ni enemistades. Solo seres humanos tratando de sobrevivir. Si algo puedo contarles es que el mundo que conocimos ya se ha ido, y lo que venga será, sin lugar a dudas, un nuevo capítulo. Pero la pregunta es, ¿quién escribirá esa historia?